miércoles, 7 de septiembre de 2011

Capitulo 9

_ De vuelta al pasado _

Edward Cullen estaba en todas las portadas de las revistas, en todas las emisoras y en todos los canales de televisión. Todo el mundo hablaba de él y de su estúpida música, estaba en cada parte a la que iba. ¡No podía escapar de él ni estando a metros de distancia!

Era lo peor que me podía pasar porque era revivir constantemente el dolor que había en mi corazón y eso honestamente no me ayudaba ni anímicamente, ni universitariamente y mucho menos psicológicamente… Me iba a volver loca…

- Isabella por Dios regresa a este maldito mundo y dime que es lo que te está pasando, llevamos seis meses de conocernos y desde la primera vez que te conocí no dejas ese dolor que cargas día tras día, esa tristeza que reflejan tus ojos es mortificante y no soporto más esto – grito Angie sacándome de mi misma.

- Angie por favor hoy no estoy para tus regaños, de verdad – dije pesadamente.

- Es que no es justo que en todo este tiempo y estos meses de amistad no me hayas querido contar que es lo que te hace tan triste – dijo Angie melancólicamente.

Era verdad en todo este tiempo nunca le había contado a Angie lo que me acongojaba y no era porque no confiaba en ella solo que hablarlo era herirme más y más y la verdad trataba con todas mis fuerzas escapar del tema Edward Cullen así el mundo quisiera meterlo en mi cabeza.

- Angie tenemos que estudiar para el examen final de mañana – dije tratando de esquivar el tema.

- Bella tu ni siquiera sabes que es lo que tienes que estudiar, no sé cómo has logrado ganar las asignaturas si siempre estas presente en las clases en cuerpo pero no en mente – me critico Angie.

- Estudiemos por favor – dije secamente.

- ¡No más! – Grito Angie y se levantó de la silla – Estoy harta de esta situación y no pienso ni quiero seguir así.

- ¿Qué es lo que quieres de mi Angie Meraz? – Grite molesta – No puedo ser alguien que en verdad no soy, trato con todas mis fuerzas pero esto es más fuerte que yo.

- Pues entonces déjame ayudarte pero dime que es lo que pasa – exigió ella.

- ¡No quiero! – dije rotundamente.

- Entonces olvídalo y olvida mi maldita amistad porque no pienso seguir así – dijo Angie mientras caminaba hacia la puerta.

- Angie por favor – suplique con lágrimas en mis ojos – No me dejes sola.

- Bella es lo que intento día tras día pero no te dejas ayudar – se excusó Angie.

- No puedo más – dije y rompí a llorar.

- Llora de una maldita vez, desahógate y deja que ese dolor se vaya – dijo mi amiga – Pero no olvides que yo también puedo escucharte.

Pasaron horas y horas en las que no dejaba de llorar como en los primeros días cuando Edward se marchó, no encontraba consuelo y solo me aferraba al abrazo de mi amiga que en estos momentos era casi como mi hermana o mi madre. Intentaba parar el llanto pero entre más lo intentaba más lagrimas salían de mis ojos, no comprendía como en algo tan pequeño como mis ojos cabían tantas lagrimas pero lo que si entendía era que esta vez no estaba sola llorando había alguien hay… Estaba Angie y eso en estos momentos lo era todo.

Después de tantas y tantas lagrimas por fin el llanto ceso y logre controlar mi corazón, me sentía vacía pero seguía respirando y mi amiga seguía allí tan callada como cada vez que lloraba.

- ¿Eso fue todo o aún hay más? – pregunto a la expectativa.

- Creo que es todo – dije casi en un susurro.

- ¿Estas lista para hablar?

- Angie – dije apesadumbrada.

- Creo que merezco una explicación de tantas lágrimas que he visto en estos seis meses de amistad porque son más que las sonrisas.

- Mi llanto tiene dolor propio – dije tratando de sonreír – Se llama Edward Cullen.

- ¿EDWARD CULLEN, EL MUSICO? – Grito ensordecedoramente ella - ¿Lo conoces?

- Si fuimos novios.

- ¿Fueron? – Pregunto confundida – ¿Y cómo es posible que hayas terminado con ese triple papacito?

- Una muy larga historia – dije entristecida.

- Pues si te he visto llorar por seis meses creo que puedo soportar esa historia tan larga – sonrió.

No quería recordar todos aquellos detalles de la historia pero Angie era mi amiga y se merecía saber todo lo que había pasado así que me regrese al pasado y le conté cada detalle feliz del comienzo de esta historia y cada detalle triste del final de la misma.

Angie en ningún momento me interrumpió y yo odie eso porque si me hubiera interrumpido quizás hubiera olvidado algún detalle pero con su silencio recordé cada momento y cada cosa de las que vivimos Edward y yo. Y aunque fue durísimo recordar y volver al pasado debo reconocer que fue un alivio desahogarme y contarle todo a mi única y verdadera amiga…

2 comentarios:

  1. Hola...

    Siento mucho si el capitulo quedo corto pero ustedes no saben lo dificil que a sido poder escribir en estos dias, aun asi logre hacer algunas letras y espero que les guste...

    XOXO♥

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  2. Menos mal existen las amigas qe nunca lo dejan solo a una.

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